Según Water Footprint Network, en el ranking de naciones con mayor huella hídrica del planeta, España se sitúa en octavo lugar y en el segundo puesto en el ranking europeo. Pero si hablamos de consumo de agua, en España no es elevado ya que se sitúa en unos 132 litros por habitante al día, ocupando el undécimo puesto del ranking europeo. Del total de agua extraída en nuestro país, casi un 70 % se destina a la agricultura, un 17,6% a uso industrial y el 14,2 % restante al consumo municipal.

FCC Medio Ambiente continúa realizando grandes esfuerzos para tratar de adaptarse a las consecuencias derivadas del cambio climático y, en la medida de lo posible, mitigar los efectos adversos sobre los recursos hídricos. Favorecer el consumo racional y eficiente de este recurso y fomentar el uso de agua procedente de fuentes alternativas es una prioridad para nosotros.

Para reducir y optimizar el consumo de agua en los trabajos de mantenimiento, conservación de las zonas verdes y el arbolado en las ciudades en las que prestamos nuestros servicios se fomenta la introducción de criterios de sostenibilidad como son:

Manejo eficiente del riego:

• Sustitución progresiva del riego manual por el riego automático, además de potenciarlo asociándole tecnologías novedosas y avanzadas como la telegestión.
• Optimización de la aportación del recurso hídrico por aplicación de riego nocturno.
• Utilización de sistemas de riego localizado y elementos que ayuden a evitar las escorrentías superficiales, como válvulas antidrenantes, para prevenir pérdidas innecesarias de agua en zonas de taludes, y goteros autocompensantes que permiten una homogeneidad en los aportes.
• Instalación de estaciones meteorológicas y sensores de humedad que permitan:
  • Un cálculo de dotaciones, teniendo en cuenta un conjunto de factores como las orientaciones, el tipo de suelo o la pendiente, que van a determinar si es conveniente aumentar la frecuencia de riego y bajar la dotación, o al contrario.
  • El manejo de la ETP (Evapotranspiración Potencial) que, en cada momento del año, puede determinar las exigencias hídricas de las plantaciones, ajustándolas a las condiciones climáticas existentes.
• Mantenimiento adecuado del sistema de riego: realizar inspecciones de rutina para comprobar si hay tuberías rotas, aspersores o goteros averiados, etc.
• Tecnificación de los sistemas de control como la utilización de geófonos para la detección de fugas en la red de riego.
• Instalación de pavimento drenante en alcorques para la mejora del aprovechamiento del agua de riego. Selección de especies con menores requerimientos hídricos y mejor adaptadas a la climatología:

Selección de especies con menores requerimientos hídricos y mejor adaptadas a la climatología:

• Para las nuevas plantaciones, reposiciones de marras o sustituciones de árboles, arbustos y macizos de flor se seleccionan especies adaptadas a la climatología de cada municipio y con bajas necesidades hídricas